Con esta nueva norma, impulsada por el presidente Luis Lacalle, la situación queda bastante parecida al sistema chileno.
El Senado uruguayo aprobó la Ley de Reforma de la Seguridad Social, la cual desprende el aumento de la edad de jubilación de 60 a 65 años, entre otras medidas. Ahora solo falta la remisión hacia el Poder Ejecutivo para que se promulgue.
Con un alto respaldo por parte de Lacalle, quien incluso la consideró como una prioridad, la propuesta viene generando alza de voces desde el año pasado, las cuales comentan que esto “no es para la gente, sino que es contra la gente” y “socialmente ineficiente”.
Esta situación ha generado grandes protestas multitudinarias, sobre todo en Montevideo. En ellas han asistido trabajadores de todos los rubros, tales como del transporte, educación y salud.
