Sábado, Abril 20, 2024
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Aniversario de medio término: A dos años del actual Gobierno

Emilio Moyano. Dr. en Psicología, integrante del Centro Interuniversitario de Envejecimiento Saludable (CIES) y académico de la U. de Talca

Este mes el Gobierno (Gbno.) cumple dos años. Se trata de un Gbno. que se instaló con lentitud y con un lenguaje que incluía términos como política exterior feminista y turquesa, introducir inestabilidad al sistema, derrocar el capitalismo, wallmapu, y otros ya dejados atrás. No contar con mayorías parlamentarias entraba sus deseos y operar, y el contexto global tampoco es facilitador.

¿Qué se puede identificar cómo positivo para los ciudadanos en estos dos años?

(1) Copago cero en el sistema público de salud para quienes están en Fonasa.

(2) Aumento del sueldo mínimo.

(3) Jornada de 40 hrs. de trabajo a 5 años plazo.

(4) Nuevo Royalty minero con la creación de un Fondo Regional para la Productividad y el Desarrollo, cuyos recursos de destinarán al financiamiento de los Gbnos. Regionales.

(5) Un serio manejo de la macroeconomía, la que lentamente parece ir en recuperación.

(6) Un único momento en que los ciudadanos parecieron abstraerse de la polarización e inseguridad social fue la realización de los juegos panamericanos desde octubre 20 a principios de noviembre 2023. Estos trajeron un clima de cohesión social, sensación positiva de ser todos uno, chilenos, y experimentar un cierto orgullo de serlo. El clima social en los estadios concernidos y en los televidentes fue muy positivo, seguro, de alegría, de disfrute personal o familiar, rompiendo con la tradición de los recurrentes disturbios, vandalismo, violencia y robos alrededor del fútbol nacional.

¿Qué es lo negativo en este período?

(1) No contar con seguridad -personal, ni colectiva ni nacional- marcada por muy altas cifras de homicidio y un temor a la delincuencia como nunca.

(2) La ingenuidad y especialmente la lentitud (ineficacia) en la adaptación institucional al tratamiento de la delincuencia y especialmente de la relativa a nuestras fronteras, alta y muy lamentablemente permeables hasta hoy.

(3) Los muy frecuentes y abruptos cambios de opinión en 180 grados de autoridades (volteretas), ‘justificados’ como ‘aprendizajes’, debilitando confianza en el liderazgo y contribuyendo así a la anomia.

(4) La ineficacia para resolver los problemas de la gente: se mantienen los indignos -y mortales- tiempos de espera para ser atendido(a) en los hospitales, la ausencia de especialistas en los Cesfam, y pensiones no mejoradas.

(5) Más allá del Gbno.: la ineficacia de un Parlamento conformado por 22 partidos políticos (!) con proyectos de ley tramitados por más de 10 años -pensiones- o de 6 -inteligencia- (por mencionar solo dos relevantes para la ciudadanía y país respectivamente) y que NO se resuelven.

(6) Una ciudadanía no oída, manteniéndose brecha entre ésta y la clase política, y que no cuenta con referéndums o plebiscitos en que aquella pueda decidir sobre lo que los parlamentarios han evidenciado que son incapaces de resolver (pensiones, u otros).

¿Qué puede ‘aprender’ -ahora si la ciudadanía- de esto?

(1) No dejar encantarse nuevamente por la retórica. Un país serio no puede darse nuevamente el lujo de elegir gente inexperimentada en gobierno y gestión del Estado.

(2) Reafirmar la necesidad de una ley de inteligencia actualizada para predecir o anticiparse, ya que los países que no la tienen lo pagan muy caro, y así evitar lamentarse con el “no lo vimos venir” (tren de Aragua llegó en 2017 a Perú).

(3) Que se debe imponer a los candidatos a cargos municipales y otros, compromisos en torno a las verdaderas necesidades de los ciudadanos: seguridad integral, disminución de esperas en salud, mejoramiento urbano, plebiscitos para dirimir cuando haya incapacidad política prolongada de resolver (v.g. en la región del Maule, en Talca, aún no se hace nada con los restos dejados por el terremoto de 2010 en su Mercado central y Escuelas Concentradas, y su centro sigue decayendo).

En fin, estimado lector, a Ud. corresponde su propia evaluación de estos dos años. Es muy improbable que un Gbno. que empezó con un pasado parlamentario de absoluto rechazo a las iniciativas del anterior, inexperto en gestión del Estado, y con el lenguaje que referimos arriba, pudiera conseguir acuerdos políticos o consensos con la oposición que le ha tocado, para poder avanzar en beneficio de la ciudadanía, generar atractividad para inversionistas, control de fronteras, y, así, una sociedad menos polarizada o más cohesionada, más ordenada o con menor anomia. Ud. ponderará si hay algo que celebrar en el segundo aniversario de este Gbno. y, sobre todo, qué de positivo puede esperarse para el segundo tiempo.

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