Rusia intensifica la tensión con el lanzamiento de un misil balístico intercontinental sobre Dnipró, mientras Peskov asegura evitar un conflicto nuclear.
Rusia elevó la tensión en el conflicto con Ucrania tras lanzar un misil balístico intercontinental, el primero dirigido a territorio ucraniano, según informó la Fuerza Aérea de Ucrania. El proyectil habría impactado en fábricas e infraestructuras críticas de Dnipró, en el centro del país, y habría sido lanzado desde la región de Astracán, en el sur de Rusia.
El portavoz presidencial ruso, Dmitri Peskov, aseguró en su rueda de prensa diaria que Rusia mantiene una postura “responsable” frente a su doctrina nuclear y destacó que “hace el máximo esfuerzo para evitar un conflicto nuclear”. Asimismo, expresó su confianza en que otros países actúen con la misma responsabilidad y eviten realizar acciones provocadoras.
Sobre el lanzamiento del misil, Peskov remitió al Ministerio de Defensa ruso, el cual no hizo alusión al hecho en su parte oficial. La doctrina nuclear rusa, recién aprobada por el presidente Vladímir Putin, autoriza el uso de armas nucleares incluso en ataques convencionales que comprometan la soberanía de Rusia y Bielorrusia.
En los últimos días, las regiones rusas de Kursk y Briansk fueron atacadas con misiles estadounidenses de largo alcance, aumentando la tensión. Los misiles intercontinentales, capaces de portar múltiples cargas nucleares, forman parte de la tríada nuclear rusa, que incluye submarinos atómicos y aviación estratégica.