La prefecta inspectora Cristina Vilches Montenegro fue retirada de su cargo como Jefa Nacional de Inteligencia Policial, en medio de las investigaciones relacionadas con el Caso Monsalve, en un movimiento que apunta a fortalecer la transparencia y prudencia de las actuaciones.
La Policía de Investigaciones (PDI) ha tomado una drástica decisión en el marco del Caso Monsalve. La institución decidió el “retiro absoluto” de la prefecta inspectora Cristina Vilches Montenegro, quien ocupaba el cargo de Jefa Nacional de Inteligencia Policial. Esta medida fue tomada en base a la necesidad de mantener “el estándar de prudencia” requerido para la gestión de las acciones vinculadas a la Ley de Inteligencia, según expresa el comunicado oficial emitido por la PDI.
El Caso Monsalve ha generado una serie de movimientos dentro de la institución, lo que reafirma el compromiso de la PDI con la transparencia y el cumplimiento de la ley. Aunque el comunicado no ahonda en los detalles de la remoción, la referencia a la prudencia sugiere que la decisión busca evitar cualquier sombra sobre los procesos investigativos en curso.
En un comunicado escueto, la PDI subrayó que mantiene su colaboración con las autoridades y los procesos investigativos que rodean el caso. No obstante, el retiro de la prefecta Vilches marca un antes y un después en el manejo de la inteligencia policial dentro de la institución.
Este movimiento también es visto como un esfuerzo para mantener la credibilidad pública y garantizar que las acciones de la PDI se alineen con los más altos estándares de actuación, especialmente en situaciones de alta sensibilidad como las que involucran el Caso Monsalve.
La decisión ha causado revuelo en los círculos internos de la PDI, resaltando la importancia de preservar la imagen de una institución que, pese a la tormenta mediática, busca seguir su camino hacia una mayor transparencia y responsabilidad institucional.