Este 22 de agosto, Chile se une a la celebración del Día Mundial del Folclore, una fecha que honra las expresiones artísticas y autóctonas que reflejan las tradiciones, costumbres y rasgos culturales de diversas regiones del país y del mundo.
Esta efeméride es una oportunidad para destacar la riqueza del folclore chileno, que se manifiesta en su música, bailes, celebraciones y artesanías, todas ellas parte esencial del patrimonio cultural y la identidad nacional.
El folclore es un elemento clave en la construcción del sentido de pertenencia y arraigo de cada nación, y en Chile, su importancia se refleja en la preservación y difusión de tradiciones que han sido transmitidas de generación en generación. Desde la cueca, la danza nacional, hasta las leyendas y mitos que forman parte de la narrativa popular, el folclore chileno constituye un legado cultural que sigue vivo gracias al esfuerzo de estudiosos, investigadores y difusores que se dedican a su conservación.
El origen del término “folclore” se remonta al año 1846, cuando el arqueólogo británico William Jhon Thoms lo utilizó por primera vez en una columna semanal titulada “Folk-Lore” en la revista británica The Athenaeum. Esta palabra, que combina los términos “folk” (pueblo) y “lore” (saber), expresa el conocimiento del pueblo y engloba todas aquellas manifestaciones que representan la identidad única e irrepetible de una cultura.
Este 22 de agosto, Chile y el mundo rinden homenaje no solo a las tradiciones y costumbres, sino también a aquellos que han dedicado sus vidas a estudiar y difundir el folclore, asegurando que estas valiosas manifestaciones culturales perduren en el tiempo y continúen enriqueciendo la identidad de las naciones.
¿Sabías estos 10 datos sobre el folclore nacional?
La Cueca como Danza Nacional: La cueca, declarada baile nacional en 1979, es una representación del cortejo amoroso entre un gallo y una gallina. Cada región de Chile tiene su propia versión de la cueca, adaptada a sus costumbres y tradiciones locales.
Los Huasos Chilenos: Los huasos, íconos del folclore rural, son los vaqueros tradicionales de la zona central de Chile. Su vestimenta, que incluye sombreros de ala ancha, chaquetas cortas y ponchos, es un símbolo de la identidad nacional.
La Fiesta de La Tirana: Celebrada en la localidad de La Tirana, en el norte de Chile, esta fiesta mezcla tradiciones indígenas y cristianas, y es uno de los eventos folclóricos más importantes del país. Incluye danzas como la Diablada, donde los participantes se visten con trajes coloridos y máscaras.
El Roto Chileno: El “roto” es una figura emblemática del folclore chileno que representa al hombre humilde y trabajador. Aunque históricamente se usaba de manera despectiva, con el tiempo se ha resignificado como un símbolo de resistencia y orgullo.
La Paya: Similar a las batallas de rap modernas, la paya es un duelo verbal de rimas improvisadas en forma de versos octosílabos. Es una tradición popular en las fiestas campesinas y una muestra del ingenio y la agilidad mental de los payadores.
Mitos y Leyendas del Sur: La región de Chiloé es rica en mitos y leyendas que forman parte del folclore chileno. Entre los más conocidos están el Trauco, un ser mitológico que seduce a las mujeres, y el Caleuche, un barco fantasma que navega por las aguas del archipiélago.
El Gorro de Lana (Chupalla): La chupalla es un sombrero de paja tradicional usado por los huasos, pero en el sur de Chile, se han hecho versiones de lana muy características, especialmente en zonas más frías como Chiloé. Este gorro es un símbolo de identidad y resistencia al clima.
La Cocina Chilena como Folclore: Los platos tradicionales, como las empanadas, el pastel de choclo, y el curanto (cocido en un hoyo con piedras calientes), son una parte esencial del folclore chileno. Cada región tiene sus propias especialidades que se han transmitido de generación en generación.
El Folclore Mapuche: El pueblo mapuche ha mantenido vivas sus tradiciones, que incluyen música con instrumentos como la trutruca y el kultrún, y rituales como el Machitún, una ceremonia de sanación. Su folclore es una parte integral de la identidad cultural de Chile.
