La comuna maulina y capital provincial fue fundada un 9 de octubre de 1743.
Un 9 de octubre de 1743, el gobernador José Antonio Manso de Velasco fundó la ciudad de Curicó, la cual originalmente se denominó “San José de Buenavista de Curicó”.
Cabe decir que su nombre, significa Aguas Negras en mapudungún.
En el acta de fundación de Curicó se relata que inicialmente el gobernador no tenía planes de establecer una villa en ese lugar.
Sin embargo, al encontrar una gran cantidad de pobladores y religiosos en la zona que solicitaron la creación formal de la villa, decidieron nombrarla San José de Buena Vista, en honor al lugar ya conocido.
Curicó es una de las ciudades más pobladas del Valle Central chileno, con más de 163 mil habitantes.
La ciudad es conocida por sus productos característicos, que incluyen tortas, frutas, cemento, azúcar, salsa de tomate y vinos de calidad internacional.
Es considerada la capital agroindustrial de Chile debido a su constante crecimiento y dinamismo económico.
La cultura del vino es una parte distintiva de Curicó, y la ciudad marca el comienzo de un circuito turístico por las viñas del valle.
Asimismo, una de las atracciones más destacadas es la Plaza de Armas, designada como Zona Típica.
Aquella, está rodeada por sesenta palmeras Phoenix traídas desde las Islas Canarias.
Además, cuenta con esculturas, fuentes de agua y un kiosco de hierro que es considerado Monumento Nacional.
Igualmente, otro lugar muy popular durante las fiestas patrias es el Parque Cerro Carlos Condell, ubicado en el centro de la ciudad, con una altitud de 99 metros sobre el nivel del mar y una extensión de 45,8 hectáreas.
Actualmente, es una comuna que ha debido enfrentar “situaciones difíciles, terremotos, pandemias, inundaciones, cisis económicas, derrotas… Pero simpre hemos sabido levantar la cabeza”, indicó el alcalde Javier Muñoz en un saludo por los 280 años.
