La empresa enfrenta un complicado panorama además por vender ropa falsificada.
La Corte de Apelaciones de Talca, confirmó los fallos emitidos por el Segundo Juzgado de Policía Local, luego de que la empresa transgrediera la Ley del Consumidor, vendiendo productos sin stocks a sus clientes.
Dicho caso también fue acogido por el Servicio Nacional del Consumidor (SERNAC), luego de que el primer caso se resgistrara en agosto de 2020, cuando un ciudadano de la zona sur de Talca, compró un living comedor en La Polar, avaluado en $254.980 pesos.
La fecha de despacho, estaba programada para el 29 de agosto, 12 días después de haber concretado la compra, pero el producto no llegó.
El segundo caso fue el 31 de mayo de 2021, cuando una mujer oriunda de Villa Maule en Talca, compró una aspiradora por internet de un costo de $35.990 pesos.
Nuevamente, la empresa no disponía del producto, por lo cual le ofreció a la clienta cambiarlo por otro, opción a la cual ella no accedió.
Ambos sujetos afectados, se dirigieron a la Dirección Regional del SERNAC en el Maule, donde interpusieron un reclamo, por lo cual el Servicio del Consumidor interpuso dos demandas.
Fue el Segundo Juzgado de Garantía Local el encargado de establecer que La Polar no respetó los derechos de los afectados, infringiendo la Ley del Consumidor, al actuar con negligencia y no cumplir con los requerimientos mínimos de profesionalismo que resguardan la integridad patrimonial de los afectados.
Como resolución, la Corte de Apelaciones condenó a la tienda La Polar al pago de una multa total de 20 y 25 UTM en cada uno de los fallos, esto es, en total, alrededor de $2 millones ochocientos mil pesos, además de tener que asumir las costas por el proceso judicial.
Este dictamen se da en medio del oscuro panorama que enfrenta la empresa de retail, ya que enfrenta acusaciones de falsificar ropas de marca como Adidas, Wrangler, Under Armour, entre otras.
Además, la caída de las acciones de la empresa provocaría despidos masivos de empleadores. La situación parece no repuntar.
