Una investigación oficial reveló que agencias de adopción en Corea del Sur enviaron niños al extranjero con identidades falsas y sin consentimiento legal, generando ganancias con cada entrega.
Con información del medio asociado: BBCL.
Una reciente investigación expuso el oscuro negocio de las adopciones internacionales en Corea del Sur, donde agencias privadas falsificaban documentos para enviar niños a Estados Unidos y Europa. El informe, publicado por la Comisión de la Verdad y la Reconciliación, responsabiliza al Estado surcoreano por permitir estas prácticas durante décadas.
Según el reporte, las agencias presentaban a niños con padres vivos como huérfanos para facilitar su adopción. En algunos casos, cuando un bebé moría antes del traslado, su identidad era reutilizada para otro menor. También se descubrió que familias fueron forzadas a renunciar a sus hijos o que los niños eran secuestrados en barrios vulnerables.
Uno de los casos revelados es el de Chang, una niña nacida en Seúl en 1974. Aunque su agencia conocía a su madre biológica, los documentos enviados a Dinamarca la identificaban como huérfana de un orfanato. La investigación también denunció que el dinero obtenido era reinvertido para captar más menores, convirtiendo las adopciones en un negocio lucrativo.
Entre 1953 y 1985, cerca de 200 mil niños surcoreanos fueron enviados al extranjero. Solo en 1985, 8.837 menores fueron adoptados fuera del país. La presidenta de la comisión, Sun-young Park, calificó los hechos como una “parte vergonzosa de nuestra historia”, exigiendo disculpas oficiales del Gobierno.
Países como Noruega y Dinamarca ya investigan los casos, mientras que Estados Unidos aún no ha tomado medidas. Aunque la comisión no puede procesar a las agencias involucradas, el Gobierno surcoreano debe seguir sus recomendaciones.
