El Papa Francisco confirmó la canonización de la beata Vicenta Maria Poloni tras reconocer como milagro la recuperación de una mujer desahuciada en Los Ángeles, Biobío.
El Vaticano anunció la aprobación de un milagro ocurrido en Los Ángeles, región del Biobío, atribuido a la intercesión de Vicenta Maria Poloni, fundadora del Instituto de las Hermanas de la Misericordia. Este reconocimiento permitirá su canonización, marcando un hito para la comunidad católica en Chile.
El Papa Francisco, tras reunirse con el cardenal Marcello Semeraro, prefecto del Dicasterio para las Causas de los Santos, autorizó la promulgación del decreto que certifica el milagro. El hecho se remonta a 2013, cuando Audelia Parra, de 63 años, enfrentó una serie de complicaciones médicas severas tras una cirugía de emergencia.
Parra presentó un cuadro crítico que incluyó shock hemorrágico, insuficiencia renal y múltiples intervenciones quirúrgicas. Su recuperación, considerada inexplicable por la comunidad médica, ocurrió luego de intensas oraciones dirigidas a la imagen de la beata por su nieto y fieles en Quilleco.
El Vaticano destacó que la paciente, desahuciada por los médicos, no solo sobrevivió sino que retomó una vida plena sin secuelas. Esta sanación extraordinaria fue atribuida a la intercesión de Vicenta Maria Poloni, quien dedicó su vida a servir a los más necesitados en el siglo XIX.
¿Quién es Vicenta Maria Poloni?
Nacida como Luigia Francesca María en Verona en 1802, Vicenta María Poloni creció en un entorno marcado por los valores religiosos y un profundo sentido de la solidaridad. Última de doce hermanos, encontró en el cuidado de los más débiles su verdadera vocación, guiada espiritualmente por el Beato Carlo Steeb.
En 1840, Poloni dejó atrás las expectativas familiares para dedicarse a los ancianos y enfermos en el Pio Ricovero. Ocho años después, junto a doce compañeras, fundó el Instituto de las Hermanas de la Misericordia, adoptando los votos religiosos y un nombre que reflejaba su misión.
Su legado trasciende su muerte en 1855, siendo reconocida como un ejemplo de fe y misericordia con su beatificación en 2008.
