Diputados exigen celeridad al proyecto de castración química para condenados por pedofilia, tras el caso de una red de pedofilia en Chillán y avances similares en Brasil.
Los diputados Rubén Oyarzo (Independiente) y Tomás Lagomarsino (Partido Radical) exigieron que se dé prioridad al proyecto de ley sobre castración química o inhibición sexual para quienes sean condenados por delitos de pedofilia. La iniciativa, presentada en septiembre, está estancada en la comisión de Constitución.
Este llamado se da tras el caso de pedofilia que conmocionó a la Región de Ñuble, donde una menor fue víctima de abuso sistemático durante 10 años, y luego de que en Brasil se aprobara una medida similar.
El diputado Oyarzo calificó el caso de Ñuble como “horrendo y monstruoso”, destacando que la iniciativa busca facultar a los jueces para ordenar el uso de medicamentos que inhiben el deseo sexual en agresores sexuales condenados. Según explicó, el procedimiento podría ser voluntario o determinado por la justicia.
“En Chile, lamentablemente, hay redes de pedofilia. No podemos permitir que estos casos se repitan. La discusión es seria y debe darse ahora”, enfatizó Oyarzo.
Por su parte, el diputado Lagomarsino subrayó la importancia de otorgar herramientas legales para evitar que agresores reincidan tras cumplir sus penas. “El juez debe tener atribuciones claras para prevenir nuevos delitos”, señaló.