La Contraloría General reveló graves irregularidades en los controles aduaneros del Aeropuerto AMB, exponiendo fallas que podrían facilitar el contrabando.
La Contraloría General de la República (CGR) ha sacado a la luz graves deficiencias en los controles aduaneros del Aeropuerto Arturo Merino Benítez (AMB). Según el informe final N° 535/2024, la Dirección Regional de Aduana Metropolitana opera con un sistema debilitado, sin los recursos necesarios ni procedimientos adecuados para garantizar la seguridad.
Entre los hallazgos más críticos destaca la ausencia de un scanner para revisar mercancías, lo que obliga a los fiscalizadores a realizar inspecciones visuales. Este método aumenta significativamente el riesgo de ingreso de drogas, armas y otros bienes prohibidos. Entre 2019 y 2023, el flujo de mercancías creció de manera considerable, pero el personal aduanero no ha aumentado. En 2023, se inspeccionaron apenas el 0,059% de los trámites de ingreso, evidenciando un control ineficaz.
Además, algunos despachadores se han negado a permitir inspecciones sin enfrentar las multas estipuladas por la normativa. También se detectaron agentes de aduanas involucrados en casos de contrabando e importaciones con infracciones graves, sin que se hayan aplicado acciones disciplinarias.
Otra falla grave incluye la ausencia de un armero especialista en las fiscalizaciones de armas y municiones, poniendo en peligro la correcta supervisión de mercancías sensibles.
Ante esta situación, la CGR ha solicitado medidas inmediatas, como la adquisición de un scanner de rayos X y la implementación de procedimientos formales para fortalecer los controles y aplicar sanciones a los responsables.
Este informe deja en evidencia un sistema que no solo compromete la seguridad nacional, sino que también afecta la confianza en una institución clave para proteger las fronteras.
