El culturista Giuliano Pirone, de Perth, ha fallecido dos semanas después de haber permanecido inconsciente en la ducha de un gimnasio abierto las 24 horas.
El trágico incidente ocurrió el 20 de agosto, cuando Pirone, que se encontraba entrenando para una competencia de culturismo, sufrió una lesión cerebral y se desplomó en la ducha del gimnasio.
Pirone había llegado al gimnasio temprano en la mañana antes de ir a trabajar. Sin embargo, su ausencia no fue notada hasta más tarde esa noche, cuando la policía, alertada por su madre, irrumpió en el gimnasio y lo encontró en el suelo de una ducha con el agua fría corriendo. A pesar de los esfuerzos de los agentes por realizarle reanimación cardiopulmonar, Pirone nunca recuperó el conocimiento. Fue trasladado al hospital de Joondalup, donde permaneció en coma inducido durante dos semanas. Lamentablemente, falleció el jueves por la mañana.
La resonancia magnética reveló que Pirone había perdido la función cerebral. Los médicos sospechan que una bajada crítica de azúcar en sangre pudo haber causado una convulsión y, en consecuencia, la caída de Pirone. Su madre, Daniela Pirone, expresó su profundo dolor y consternación, destacando la falta de control y supervisión en los gimnasios abiertos las 24 horas.
El incidente destaca preocupaciones sobre la seguridad en gimnasios que operan sin supervisión continua. La familia de Pirone ha pedido la implementación de sistemas de check-in que alerten al personal si un cliente no se registra durante un período prolongado. La policía de Western Australia está revisando las imágenes de CCTV del gimnasio y preparará un informe para el forense para esclarecer las circunstancias del trágico suceso.