Alma Morales y Aliro San Martín tras haber perdido su principal fuente de ingresos de los últimos 18 años, comenzaron a dedicarse a la fabricación de objetos de decoración con maderas nativas de la zona.
Tras dos años de iniciado el emprendimiento, la pareja ha logrado distribuir sus productos a lo largo de la región, destacando el apoyo especialmente de Talca, su ciudad natal.
Actualmente, los oriundos de la capital maulina pudieron hacer de esta idea surgida en pandemia, su principal fuente de ingresos. Su emprendimiento lleva por nombre Decomadera Tralka, cuya cuenta de Instagram es @decomadera_tralka.
¿Por qué comenzaron a dedicarse a esto?
Mi marido siempre tuvo habilidades para los trabajos con madera, años atrás realizaba clases de decoración, me hizo varios objetos de este material. Con el tiempo continuó haciendo estas cosas. En el año 2020 se vino la pandemia y se remeció un poco nuestro hogar, ya que lo desvincularon del banco donde trabajaba. Tras ello comenzamos a tener ingenio para entretenerse, ya que por el momento no podíamos salir debido a la cuarentena.
Empezamos haciendo maceteros, luego tablas para asado y con el tiempo hemos ido sumando más cosas para el hogar. Nos hemos fortalecido también con los diferentes pedidos que nos hacen. Ha sido una bonita experiencia. Nunca pensamos que esto se convertiría en nuestra fuente principal de ingresos.
¿Cómo es la distribución del trabajo?
Actualmente mi marido fabrica, y yo me preocupo de manejar el Instagram y hablar con los clientes, no obstante, implica harto sacrificio, y hemos tratado de ir de a poco cultivando esto. Buscamos trabajar con buenas fuentes de madera nativa y también cuidar el medio ambiente.
Al momento de iniciar, ¿cómo fue el proceso de reunir los materiales?
Fue un poco difícil, como matrimonio siempre hemos tratado de tener el enfoque de ‘navegar para el mismo lado’, así que conversamos y junto a nuestros hijos obtuvimos ayuda especialmente en las fotografías para redes sociales y la pintura de los objetos. Sin embargo, con el tema de la pandemia y sus restricciones nos costaba salir, ya que solo teníamos un par de permisos; usábamos estos para hacer entregas a domicilio y para comprar materiales, y en relación con este último tema, nos costaba mucho conseguir los componentes necesarios para trabajar, aparte de que se dispararon harto los precios.
¿Qué fue lo más difícil al momento de haber iniciado?
Al principio teníamos miedo de arriesgarnos con este emprendimiento. Un ejemplo de esto es que mi marido en ese entonces trató de comprar una máquina y nos costó tomar la decisión por los temas económicos, ya que no sabíamos cómo iba a seguir la pandemia y si iba a resultar lo que queríamos hacer.
¿Tuvieron alguna ayuda económica para iniciar?
No, pero con el tiempo tuvimos gran apoyo a través de redes sociales, tras esto nos formalizamos como trabajadores, así mismo, hemos trabajado con diversas instituciones, ferreterías pequeñas, inmobiliarias, entre otros.
¿Qué es lo que más destaca de esta experiencia?
Lo que más destaco es que cuando quieres lograr algo, se puede, y siempre va a haber gente que te va a apoyar. Quizá a veces exista miedo pero hay que tener ‘garra’ para salir adelante. Lo otro es la gente, la mayoría de nuestros clientes son excelentes, eso nos hace muy contentos. Al momento de hacer las entregas a domicilio y ver la sonrisa de las personas nos pone contentos, especialmente escuchar frases como ‘está bonito’, ‘está super bien’ y ‘se pasaron’. Nos gusta, ya que buscamos ser de ayuda para las familias y entregar las cosas que cotidianamente necesitan y que no están accesibles en el mercado, todo en base al gusto de los clientes, ya que eso es súper importante.
Por último, lo más importante de ser independientes es que el trabajo nos da espacios para compartir aún más con la familia.
¿Qué palabras le diría a la comunidad maulina que está pensando en emprender?
“A la comunidad le diría que estoy super, especial con los clientes talquinos que nos han apoyado. La pandemia fue super dura, pero hizo que se desatara toda la creatividad del maulino. Espero que los maulinos sigan apoyando a las diversas pymes, ya que los emprendedores trabajan y entregan con mucho amor sus productos”.