Proyecto INIA – FIA de 20 meses de duración, irá en ayuda de 150 productoras y productores, y de 120 estudiantes de liceos agrícolas, que contarán con equipamiento y capacitación para optimizar el uso del agua.
Una alianza estratégica entre investigadores de INIA y los liceos agrícolas de Parral y Yerbas Buenas para capacitar a estudiantes y agricultores en el uso óptimo de los recursos hídricos, quedó sellada con la ejecución del proyecto “Innovación en el uso eficiente del recurso hídrico para la pequeña agricultura de la región de Maule” que desde marzo ejecuta el Instituto de Investigaciones Agropecuarias, INIA Raihuén, y que es liderado a nivel nacional, por la Fundación para la Innovación Agraria (FIA).
Según explicó el coordinador del proyecto, el investigador Abelardo Villavicencio, la iniciativa pondrá en marcha un programa de innovación en transferencia de tecnologías de riego, orientado a lograr un uso más eficiente del agua entre los pequeños y medianos productores de la Región del Maule.
El profesional de INIA Quilamapu indicó que los esfuerzos estarán puestos en generar capacidades técnicas y de gestión, lo que se complementará con una propuesta para mejorar los sistemas de riego existentes, a fin de hacer más eficiente el uso del agua entre los beneficiarios.
Trabajo con liceos agrícolas
Un aspecto central del proyecto es la vinculación y trabajo colaborativo con liceos agrícolas de la región, por lo que se contempla la participación de los liceos Federico Heise de Parral y Bicentenario Marta Martínez Cruz de Yerbas Buenas, que se agregan a los ya existentes Liceo Bicentenario Simón Bolívar de Curicó y Escuela Agrícola Sagrados Corazones de Villa Alegre, sostuvo Abelardo Villavicencio.
Este hecho fue valorado por la directora del Liceo Federico Heise, Lorena Sánchez, quien destacó que “el realizar un convenio de colaboración con una institución de prestigio como INIA, nos sirve para transferir conocimiento pertinente y contextualizado, tanto a nuestros estudiantes como a nuestros productores”. Añadió que podrán estrechar la colaboración entre estudiantes y productores, “en un escenario donde el recurso hídrico es un punto crítico para muchos de ellos”.
En tanto, el director del Liceo Marta Martínez Cruz, Cristián Rivas, expresó que la vinculación con este tipo de iniciativas “contribuye desde el ámbito formativo, donde los estudiantes adquieren nuevas tecnologías y conocimientos que emanan desde la investigación y que podrán poner en práctica, tanto en el trabajo dependiente, como en emprendimientos locales”.
El proyecto contempla la instalación de una unidad demostrativa en ambos liceos, lo que potenciará el aprendizaje en manejo hídrico y en producción de cultivos anuales y perennes.
Respecto de la incorporación de las temáticas del proyecto a los contenidos del plan de estudios, el director del Liceo Marta Martínez Cruz manifestó que “las charlas técnicas contenidas en el programa se adaptan perfectamente a los contenidos de las mallas curriculares de los estudiantes, lo que viene a complementar y actualizar temáticas, con una mirada práctica que entrega más valor al aprendizaje de los estudiantes”. Por su parte, la directora Lorena Sánchez, señaló que las temáticas “están estrechamente relacionadas con las competencias propias de la especialidad agropecuaria, ya que promueven el uso de un recurso cada vez más escaso, como el agua, aspecto estrechamente relacionado con el sello ecológico de nuestro proyecto educativo”.
Conciencia ambiental en jóvenes
“El proyecto será un gran aporte para los productores que han experimentado una baja disponibilidad de agua para riego”, expresó el representante regional para O’Higgins y Maule de (FIA), Robert Giovanetti, agregando que la nueva realidad obliga a innovar en soluciones tecnológicas para hacer más eficiente el uso del agua en la seguridad hídrica. Especial importancia asignó al trabajo con jóvenes, pues “ayudamos a fomentar una conciencia temprana entre ellos y, cuando sean adultos, podrán contar con herramientas para mejorar la competitividad del sector”.
Finalmente, la Directora Regional de INIA Raihuén, Carmen Gloria Morales, se mostró esperanzada en que las redes de trabajo generadas durante la ejecución del proyecto, “permitirán enfrentar de mejor manera los desafíos a nivel de campo, entendiendo que el camino frente al cambio climático es la incorporación de tecnologías y su adecuado uso en el tiempo”.